¿Quieres saber si tu hígado está sulfatando de forma apropiada o, por el contrario, lo hace lento? Pues sería interesante que en las próximas analíticas te pidieran los siguientes parámetros:
◾ Colesterol total
◾ DHEA
◾ DHEA-sulfato
◾ Androstenediona
◾ Zinc
◾ Ácido úrico (urato)
◾ Cobre
Sabrás que tu hígado sulfata lento si:
❌ la DHEA es más alta que la DHEA-sulfato
❌ la androstenediona está más alta de lo normal
❌ el cobre está más alto de lo normal mientras el zinc está más bajo
❌ el colesterol total y el ácido úrico están más bajos de lo normal
Una analítica con estos valores junto a síntomas como ovarios poliquísticos, piel grasa, migraña, acné, irregularidades en el periodo menstrual, gastritis, colon irritable, dolores articulares o musculares, o sensibilidad a los químicos, nos estará indicando que nuestra sulfatación necesita ayuda.
Además de una alimentación adecuada en la que incluyas ácido retinoico, betacarotenos, cafeína y genisteína, existen una serie de suplementos que te pueden ayudar a favorecer este proceso. ¿Cuáles son?
◾ Suplementos que contengan grupos de sulfatos
◾ Vitamina A o betacarotenos
◾ Jengibre en cápsulas
Para interpretar bien los resultados, te recomendamos visitarte con un profesional experto en el tema, de modo que pueda pautarte de forma específica los suplementos adecuados.