La Akkermansia, la reina de las top-model y de la pérdida de peso. Esta bacteria ayuda a reducir los marcadores inflamatorios (TNF-alfa, Il1-beta, Il-6), la resistencia a la insulina y el tejido adiposo. Y por ello es una de las más recomendables (además de los lactobacilos y bifidobacterias) para ayudar a combatir el sobrepeso y las alteraciones metabólicas.
La dieta cetogénica es rica en esta bacteria, por eso es fácil adelgazar llevando una alimentación similar, ya que ayuda a mejorar la sensibilidad a la insulina y a regular la glucosa.
En cambio, el intestino de las personas con sobrepeso u obesidad se caracteriza por:
◼ Menor diversidad bacteriana
◼ Menor cantidad de bacterias como la Akkermansia o el Faecolibacterium prousnitzii.
En este tipo de situaciones, entre otras, nos interesa aumentar la presencia de estas bacterias en el intestino y lo podemos lograr del siguiente modo:
◼ Eliminando el gluten, alcohol y grasas trans
◼ Comiendo alimentos ricos en PAC: té verde, té negro, vino, uvas, arándanos
◼ Añadiendo ruibarbo en ensaladas o bebiendo en forma de zumo verde
◼ Consumiendo alimentos ricos en quercetina (ajo, cebolla, puerro, uva, manzana, té verde y trigo sarraceno)
◼ Tomando FOS y almidón resistente
◼ Consumiendo alimentos fermentados
¿Cuántas de estas cosas haces para mejorar tus niveles de Akkermansia?