¿Te sientan mal el aguacate, el pimiento verde o los albaricoques? Algunos vegetales y frutas, como las que llevan hueso (ciruela, melocotón, aguacate, albaricoques...) son naturalmente ricos en sorbitol, un poliol que a veces da síntomas gastrointestinales, como gases, hinchazón o diarrea.
El sorbitol se absorbe en el intestino delgado por medio de un transportador que comparte con la fructosa, el GLUT5, y también por difusión pasiva a través de los enterocitos. Cuando el transportador no funciona correctamente o hay alguna alteración en el epitelio intestinal, se producen efectos osmóticos en el intestino delgado y fermentaciones bacterianas en el colon.
Pero no te desanimes. No tienes que dejar de tomar del todo esos alimentos que tanto te gustan. Los síntomas de este tipo de intolerancia dependen de la dosis; es decir, probablemente no puedas tomar un aguacate entero en la ensalada, pero sí unas rodajitas encima de una tostada. Según la Monash University, hasta 30 g de aguacate no deberían ser un problema.
Si te encantan las cerezas, pero te sientan fatal, prueba tomando dos o tres, pues hasta 25 g es una cantidad tolerable. Y ten en cuenta que, además, estas dosis pueden variar de persona a persona (hay que ir probando).
Y, por último, fíjate en las etiquetas de las bebidas, alimentos procesados, chicles o caramelos que indiquen que son “sin azúcar”, en los medicamentos presentados en formato líquido e incluso en los suplementos naturales, pues el sorbitol se añade como edulcorante bajo el nombre E-420 para mejorar el sabor, para que nos guste más y repitamos.