El hidrógeno molecular (gas H2) es la molécula más pequeña y ligera que existe en la atmósfera terrestre. Un gas inodoro, incoloro, no tóxico, no reactivo y muy permeable, es decir, que tiene la particularidad de poder entrar fácilmente a través de las membranas celulares, y actuar a nivel intracelular y sistémico.
Asimismo, también puede pasar la barrera hematoencefálica para brindar protección antiinflamatoria y antioxidante a nuestro cerebro. ¿Sabes cuáles son los beneficios del hidrógeno?
◼ Antiinflamatorio
◼ Antioxidante
◼ Regulador del metabolismo energético mitocondrial
◼ Reduce el estrés del retículo endoplásmico
◼ Reguladora del sistema inmunológico
◼ Reduce la muerte celular
La ciencia lo propone como una propuesta tanto a nivel preventivo como tratamiento de enfermedades que comparten un origen inflamatorio, estrés oxidativo y disfunción mitocondrial. Pero, ¿Cómo podemos tomarlo?
La mejor manera de introducir el hidrógeno a tu vida es en cápsulas, o bien a través del agua hidrogenada. En una publicación anterior te contamos algunos aspectos a tener en cuenta a la hora de escoger el tipo de agua que bebemos, porque es importante consumir agua limpia, de la mejor calidad posible.
¿Conocías la existencia del agua hidrogenada? ¿Qué dudas tienes?